Entornos naturales de Santa Cruz de Tenerife

Santa Cruz de Tenerife es una isla montañosa de las Islas Canarias. Casi la mitad de la isla está protegida de una u otra forma por la Red Canaria de Espacios Naturales Protegidos. En Tenerife se encuentra la cima más alta de España, el Teide (3.718 metros). El macizo del Teide fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 2007.

Está inscrito en un gran circo volcánico, las Cañadas del Teide, en el que se encuentran dos conos volcánicos, el Pico Viejo, con 800 metros de diámetro, y el Teide, que de hecho está formado por dos cráteres concéntricos, el de la Rambleta y el del Pilón.

Durante la ascensión al Teide, se suceden las zonas cubiertas de diferentes tipos de arbustos, hasta llegar a un auténtico paisaje alpino con espesos bosques de abetos negros. En primavera, sorprende la eclosión floral de las violetas del Teide, la retama y los espectaculares tajinastes, con sus rojas flores que alcanzan los tres metros de altura. En invierno, maravilla la panorámica del Teide nevado. El parque nacional ofrece visitas guiadas a pie así como varias pistas senderistas.

El valle de La Oratava está situado al norte del macizo, en las faldas del Teide descendiendo hasta el oceáno Atlántico. Su gradiente, desde los 2.387 metros del Izaña hasta el nivel del mar, le proporciona una gran diversidad climática y vegetal. En los territorios de menor altitud se practica una agricultura intensiva, facilitada por el aprovechamiento del agua acumulada en el macizo del Teide.

El Parque Natural de la Corona Forestal es el mayor espacio protegido del archipiélago canario. Forma una corona alrededor del macizo del Teide y las Cañadas. Presenta bosques de pino canario y laurisilva, cortadaos por coladas de lavas recientes.

El barranco del Infierno es un valle de portentosa vegetación en el desértico paisaje del sur de la isla de Tenerife. Es un clásico del senderismo tinerfeño por lo amable del paisaje y por ser el único lugar de la isla con manantiales de de agua potable natural.

Por último, el Parque Rural de Anaga, situado en el extremo septentrional de la isla, es un macizo montañoso con las cimas de sus montes cubiertas por densos bosques de pino canario y laurisilva, de brezo y de sabinas, y pobladas por gran número de aves.

Foto vía Sweet Holidays