Las antiguas merindades burgalesas

Os planteo un atractiva ruta por la provincia de Burgos entre la bella Medina de Pomar y Espinosa de los Monteros a lo largo de apenas 62 kilómetros. Un recorrido perfecto para hacerlo en un día durante este verano. Se podrá disfrutar  de la naturaleza, el patrimonio histórico-artístico y la gastronomía de la Comunidad Autónoma de Castilla-León.

El territorio situado al norte de la provincia burgalesa está integrado por las antiguas divisiones jurisdiccionales que estaban bajo la autoridad de un merino. Esta comarca presenta gran interés cultural y un magnífico patrimonio, demás de una atractivo paisaje que merece conocer.

El recorrido por las siete merindades determina una compleja y preciosa ruta toda vez que la zona está atravesada por numerosas carreteras comarcales y locales de recorrido sinuoso.

La ruta comienza en Medina de Pomar que era la capital de la merindad de Castilla La Vieja y está situada en la rica vega del Trueba. Allí hay que fijarse en la plaza de Somovilla, la calle Mayor, la iglesia de Santa Cruz, el ayuntamiento, el alcázar de los Velasco y el monasterio de Santa Clara.

Seguimos hacia Incinillas donde el río Ebro discurre por el desfiladero de los Hocinos. Desde Villarcayo, capital administrativa de las merindades, famosa por sus deliciosas morcillas de arroz, partimos a Escanduso, que conserva una bellísima iglesia románica.

Por un recorrido de abrupto relieve se alcanza San Martín de las Ollas y ya en las proximidades de la localidad de  Cueva, podemos contemplar el complejo cárstico de Ojo Guareña, a cuyo interés geológico se une el de las interesantes pinturas rupestres que guarda en su interior.

Por último, concluiremos nuestro itinerario burgalés en la espléndida población de Espinosa de los Monteros, importante centro turístico que ha sabido mantener la arquitectura popular de su bello caserío.

Foto vía Aquagest