España cuenta con rincones maravillosos. Hay muchos sitios donde uno debería viajar al menos una vez en su vida. Uno de ellos es el pequeño y singular pueblo castellano de Poza de la Sal. Situado a menos de 40 kilómetros de Burgos. Poza de la Sal se halla enriscada en la ladera de una sierra y protegida por el castillo de los Rojas. Se trata de un pueblo de calles estrechas y empinadas en medio de casas blasonadas que fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1982.