El Camino de los Buenos Hombres se amplía durante ese año con un ramal paralelo del itinerario central que se unirá a la red de senderos del Alt Urgell y el Pallars Sobirà. La parte nueva de esta ruta catalana, que recibe el nombre de El Camino del Último Cátaro, transformará la travesía transfronteriza hasta ahora lineal entre el santuario de Queralt, en el Berguedà, y el castillo de Montségur, en el departamento francés de Ariège.
El Camino del Último Cátaro se ambienta en la notable historia de Guilhem Belibasta, el último perfecto o sacerdote cátaro conocido en el mundo, que se puede leer en la novela «El cátaro imperfecto» de Víctor Amela.
Con la ampliación del recorrido del Camino de los Buenos Hombres, la ruta se puede hacer en unos veinte días recorriendo los senderos de los alrededores de Tuixent, La Seu d’Urgell y Sant Joan de l’Erm, en el Alt Urgell, y la Vallferrera, en el Pallars Sobirà. Desde este lugar la ruta se dirige hacia Ariège por Monicon y Tarascon hasta Montségur.